El intendente Ariel Müller compartió con la comunidad de Maciá la inauguración del mural homenaje a Tian Gombau y Domingo Martínez, conocidos como los gallegos solidarios, en el Centro Integrador Comunitario Comedor San Roque. Durante la actividad hubo relatos, la actuación del Coro de la Escuela N°2 José María Paz, la presentación del ballet Che Rojaijú, y el descubrimiento de una placa recordatoria.
El senador departamental Juan Diego Conti; la viceintendenta Pamela Albornoz; y la directora de Cultura, Marta Cappa, entre otras autoridades locales, participaron, el sábado por la tarde, en la inauguración del mural que dibujó Edgardo Duré y pintó Pilar Foos.
En ese marco, el intendente y Tian Gombau brindaron unas palabras y los vecinos que integraron la primera comisión del comedor, María Luisa Roldán, José María Muñoz y Carmen Ghiglione, contaron cómo lograron hacer realidad el sueño de este espacio en el barrio San Roque. Además, recorrieron una muestra del archivo histórico de la Biblioteca Popular Mario Carruego, instalada en el lugar.
Al dar la bienvenida, el intendente afirmó: “A nosotros nos tocó ser gobierno con Juan Diego, a partir de 2019, y tomamos una decisión fuerte de revalorizar el Comedor y realizar una gran reconstrucción edilicia, porque no lo encontramos como nos hubiera gustado. Ahora comenzó una nueva etapa para darle más vida. Hay actividades culturales, educativas, y talleres, de lunes a sábado. No solo es un comedor, y vamos a seguir cuidando el barrio y generando cosas”.
“Vienen épocas muy difíciles. Ojalá no tuviera que venir un Tian a darnos una mano. Debería haber un Estado nacional y provincial presentes, acompañándonos, pero no están. Estamos solos, pero vamos a seguir buscando apoyo firmemente porque sabemos de la centralidad que tiene este barrio para Maciá y dentro del barrio lo que es este punto neurálgico, que es el Comedor”, agregó Ariel Müller.
Por su parte Tian Gombau manifestó: “Me siento muy feliz de ver cómo los sueños se hacen realidad. El milagro se cumplió y yo solo soy la punta del iceberg que hizo posible que esto se hiciese realidad. Estamos en un momento difícil, no solo en Argentina sino en todo el mundo, y hay veces en las que determinadas personas sin sentimientos ni humanidad llegan al poder, y deciden utilizarlo para cosas que no tendrían que hacerse, y abandonan una de las cosas más importantes que tiene que ofrecer un Estado que es la solidaridad de la gente que tiene con la gente que no tiene”.
Durante su visita, Gombau entregó una nueva donación, que será administrada por la comisión vecinal. “Nos llamamos gallegos solidarios porque lo decidimos nosotros y nos hacía mucha gracia. Antes de venir, ordenando la carpeta de gallegos solidarios, encontré un sobre con dinero y lo hemos traído. Gracias a la gente que nos ayudó a que esto fuera posible”, redondeó.
Una historia de solidaridad
En los años 2000, Tian y Martínez llegaron desde España para realizar una función de teatro en el barrio San Roque. Esta visita se concretó porque en Maciá, durante varios años, se realizaron los Encuentros de Teatro, organizados por el Grupo Teatral Municipal Caranday. Numerosos grupos de artistas, de diferentes lugares, visitaron la ciudad para compartir su arte. La sala, las calles, y los barrios eran los espacios en los que se realizaban las funciones de teatro durante los tres días que duraban estos encuentros.
Entre esos grupos, Tian Gombau y Domingo Martínez llegaron desde España, y realizaron una función en el barrio San Roque. Además, conocieron el proyecto del salón comunitario que estaban realizando los vecinos y las vecinas, que anhelaban contar con un comedor para numerosos niños y niñas que asistían, hasta ese momento, a la capillita del barrio. A partir de entonces, fueron importantes colaboradores para que esto fuera posible.
Integrantes de la Comisión Vecinal, madres y padres, iniciaron la construcción del espacio en el año 2000, un año después producto de la crisis económica los avances en la obra se retrasaron, a la vez que aumentó el número de chicos que iban al lugar.
Tian y Domingo se comprometieron a brindarles ayuda, y de regreso a su país comenzaron a realizar funciones para recaudar fondos en diferentes ciudades españolas. El dinero era enviado a Carmen Ghiglione, quien hizo intermediaria entre los “gallegos solidarios” y la Comisión Vecinal del barrio, cuyo presidente era José María Muñoz. Y para terminar la obra se sumaron la Municipalidad, comercios y particulares que ayudaron con material y mano de obra. Finalmente, en 2004 comenzó a funcionar el comedor en el nuevo salón.